Diversos estudios en el ámbito de la neurociencia han demostrado que, al igual que ocurre con el entrenamiento físico o el aprendizaje de habilidades musicales, la práctica diaria de una lengua extranjera resulta altamente beneficiosa para su adquisición, incluso si se limita a unos pocos minutos al día. En este sentido, se recomienda especialmente la realización de ejercicios de comprensión auditiva (listenings) de forma cotidiana. Dichos ejercicios pueden llevarse a cabo mediante recursos digitales disponibles en línea o a través de contenidos audiovisuales como programas de televisión y películas. Por otro lado, se desaconseja el uso de canciones como herramienta principal para el aprendizaje de estructuras lingüísticas, dado que el ritmo musical puede interferir en la asimilación intuitiva de la gramática funcional.